Gracias Víctor por prestarme tu idea.
Las persianas bajaban a las nueve de la noche, ocultando el interior de las curiosas miradas callejeras. Entonces, cuando se quedaba sola en la tienda tras una interminable jornada laboral, se desvestía -falda, blusa, zapatos y bolso prestados- y se enfundaba en el uniforme de supervisora, paseándose por los vestidores, revisando planillas, controlando escaparates aquí y allá, soñando con una vida real, en libertad. Al amanecer, radiante de alegría, volvía a vestirse con la ropa que se había sacado y se ubicaba en la vidriera, adoptando la rígida postura forzada de cada día, esperando que las persianas volvieran a subir.
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16 comentarios:
Tienen corazón los maniquís?
Apuesto que si.
Besos.
A saber cuál es su mundo real.
Buen cortito, Claudia.
Feliz fin de semana.
Un abrazo.
Juan Antonio
Este asunto de la "Mujer Orquesta" es cosa complicada..... jajajajaja.
Muy bueno, exelente remate
un beso
juank.
Mujer movida que dedica su vida a trabajos quietitos… ojalá encuentre su merecido descanso.
Me recuerda tanto la vida que llevan algunas personas de las que van en el autobús junto a nosotros cada mañana.
Muy bueno, Claudia.
Besitos.
Qué bueno, Clau, me encantó!
Hace un año atrás estábamos juntas descorchando un champagne festejando mi primer cumple blog! Te acordás?
Te dejo un besote y que pases un lindo Día de la Madre! Decile al enano que te lleve el desayuno a la cama, jaja.
Te quieroooooooooooooo!
Isa.
Muy bueno!!!
Te aplaudo, Clau.
Y de pié como te lo mereces.
Besotes.
Me gustó tu vuelta de tuerca al relato, Claudia. Siempre se puede girar un poquito más. Ah, si te forras con él, acepto un pequeño porcentaje de las ganancias. ;)
Un saludo.
Que bueno, me recuerda una cancion de Serrat donde se enamora de un maniquí.
Un abrazo,
Vicky
Qué bueno está Claudia!!
Un beso grande, buen fin de semana y feliz día de la madre, (merece señora)
Feliz Día de la Madre, Clau!!!!!!
Hola Claudia!!!
Mira vos eh!
Parece que eso de la insatisfacción es algo que abarca lo animado y lo inanimado.
¿Cuántas mujeres de carne y huesos quisieran ser un maniquí para ser miradas tantas veces en el día aunque sea así, de “pasadita”?
Porque quien mira la ropa que luce el maniquí siempre, en algún momento, la mira a ella!
Beso
Rik
Debe ser fascinante transformarse de noche y verse tan distinta.
Me gustó el relato. Muy original.
Perdón por no haber pasado a saludarte para el Día de la Madre. Lo hago ahora:
¡Ojalá hayas pasado el mejor de los días junto a tu chiquito!
Sos una super mamá.
Besos.
Que pasaría si las ventanas no vuelven a subir nunca más? Me encantaría saberlo
Estercita
Yo siempre he sospechado que algunos maniquies tienen algo de personas, sobretodo esos que te miran sonriendo como diciendo, no te apures, hoy no te suicides que mañana tendrás una agradable sorpresa. la verdad es que nunca llega esa sorpresa pero siempre que tengo ganas de suicidarme acudo a un escaparate de esos y me voy convencido de que a lo mejor al otro dia cambiará mi mala suerte.
Clica sobre mi nombre
No crees que esta situación va mucho mas allá de los límites de un local?
Cualquier mujer se va transformando y siendo y suele ocultar sus verdaderos deseos.
Abrazos
MAGAH
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