"Los errores tienen siempre un carácter sagrado. Nunca intento corregirlos.
Al contrario: lo que procede es racionalizarlos, compenetrarse con ellos integralmente. Solo después será posible sublimarlos."
Salvador Dalí
No me animo a discurrir demasiado en la palabras del genio surrealista pero, lo que habitualmente sucede, en la mayoría de los casos, es exactamente lo opuesto: enseguida tratamos de corregir el error cometido y muchas veces, por no detenernos a analizarlo profundamente, lo único que hacemos es agravarlo. Y le echamos la culpa al tiempo.
Muchas canas me salieron repitiendo la muletilla "nunca hay tiempo de hacer las cosas bien, pero sí de hacerla dos veces". Y hoy más que nunca, cuando todo es para ayer. Por qué? Por qué no nos damos y pedimos el tiempo para pensar, para analizar, para hacer nuestra propia "prueba y error", antes de llegar al resultado final? Será que se termina el tiempo, ya, ya ya? O es que la perfección dejó de ser el ideal de nadie?
Si quieren ver lo que he oído al pasar:
Maksim - Fly of the bumble bee - Rimsky Korsakov
8 comentarios:
Es el miedo, Claudia.
El miedo a las dentelladas, a las fauces del tiempo que se cierran ahogándonos la sombra.
El miedo al tiempo que viene arrasando, dejándonos las manos desnudas, huérfanas, inútiles.
Cuando gana el miedo se pierde hasta el orgullo del trabajo bien hecho.
Saludos,
Hola Clau!
Es verdad lo que decís, por lo menos en mí ha funcionado así dado que soy tan impulsiva.
La última vez que le dije a alguien "no cometo el mismo error dos veces" terminé casada con él y divorciada después de 13 años.
Pero, mis dos matrimonios y mis dos divorcios sí me llevaron a reflexionar y buscar el error.
Me tardé un poquito, no?
Me llevó cuatro años hacerlo y recién ahí me sentí preparada para salir al mundo a ver qué pasaba.
Muy bueno el post y también el video, fabuloso.
BACI, STEKI.
Está bien lo que dice el viejo Salvador… pero otorgarle carácter de sagrado al error es otra de sus exageraciones.
Me gusta aquello de no salir corriendo a disimular la imperfección, asumirse falible y darse permiso a tropezar, pero tropezar para levantarse, no para santificar la caída.
D.
La perfección, según la cultura Shaolín, es posible. En el camino uno se topa con la excelencia y de ella en adelante es difícil progresar. Pero de aspirando sólo a ser excelente uno puede toparse en el camino con la mediocridad, y de ella no hay salida.
"Repitiendo una actividad logramos la excelencia en ella, por tanto, excelencia no es un acto sino un hábito" Aristóteles.
D.
Hola te invito a conocer mi nuevo texto la otra y a formar un enlace si lo deseas chao saludos desde chile.
Aha!!! vos sos la claudia Sanchez que conoce STEKI!!! jajaja. Vengo del blog de "Hijos nuestros" hice click en tu nick y aquí estoy.. pasando a saludar.
Saludos!! otro día paso con más tiempo
Sophie
Se me acaba de borrar mi coment!
Y tenia mucha onda... tiempo de aciertos, supongo que es una señal!!
Jajajja
Besos
India
Bueno... no hay nada mejor para aprender a hacer bien una cosa que equivocarse intentando hacerla...
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